El vértigo es un síntoma que un número creciente de personas presenta hoy en día. En principio, se define como una sensación de pérdida del equilibrio y/o la percepción de que “todo da vueltas”. Según un estudio publicado en la revista “Mente y cerebro” (1), hasta en una tercera parte de las personas, el vértigo no obedece a razones orgánicas, sino psicológicas. A la vez, un estudio de neuropsicología realizado por M. Dietrich (2) reveló que entre el 30 y 40% de los casos de vértigo son de origen mental.Las personas que sufren de vértigo no orgánico lo definen de varias maneras. Dicen que se trata de un cúmulo de sensaciones, entre las cuales están: mareo, miedo, inseguridad, embotamiento, aturdimiento, sensación de desvanecimiento o de irrealidad, debilidad, fatiga, aumento de las palpitaciones, deseos de orinar y sensación de que van dentro de un barco o caminan sobre algodones.